Monster Hunter: La película es retirada de China en su primer día por un diálogo polémico

El mercado cinematográfico en China es cada vez más importante y más en un mundo donde la mayoría de salas de cine en Occidente están cerradas o con restricción de aforo, mientras que en China ya se ha recuperado la normalidad. Es por eso que el estreno de Monster Hunter: La película, la adaptación del director Paul W.S. Anderson con Milla Jovovich de protagonista, tenía puestas sus esperanzas en hacer su mayor recaudación en el país, pero se puede decir que no ha empezado con buen pie. Un diálogo entre soldados se ha hecho viral por considerarse racista con los asiáticos, obligando a su retirada en apenas 24 horas.

El analista Daniel Ahmad ha seguido la polémica desde su estreno. Parte de un diálogo en el que un personaje dice “mira mis rodillas”; otro contesta “¿qué clase de rodillas son esas?” y el primero responde “chinas”. Se trata de un juego de palabras por el sonido en inglés -knees, chinese- que recuerda con a una broma infantil -Chinese, Japanese, dirty knees – look at these set of boobies-. El supuesto gag no ha hecho mucha gracia en China y sorprende la torpeza de la distribuidora, teniendo en cuenta que este iba a ser su principal mercado.

Capcom no ha tardado en lanzar un comunicado en las redes sociales afirmando que conoce la situación, aunque en apenas unas horas el clip ya circulaba en Internet llamando al boicot. Uno de los primeros efectos se puede ver en el review bombing -oleada de análisis con susupenso- a Monster Hunter World en Steam -con menciones a la rodilla e incluso acompañándolo con burlas a la muerte de George Floyd en Estados Unidos bajo la rodilla de un policía- y la película está recibiendo críticas negativas en el país, provocando la caída de su nota media. En definitiva, la peor campaña publicitaria para el día de su estreno.

Retirada hasta el estreno de una nueva edición

Monster Hunter: La película será editada de nuevo para eliminar el diálogo que ha creado la polémica, según se informa en redes sociales, con un nuevo estreno en una próxima fecha. La pregunta es si el daño ya está hecho y logrará recuperar al menos su coste, algo que tiene bastante difícil: en Asia no es bienvenida y en Occidente la situación de los cines es muy complicada.