Joe Biden, presidente de Estados Unidos, tachó de “pensamiento neandertal’ la decisión que tomaron los gobernadores de Texas y Misisipi de levantar las medidas contra la COVID-19 y el uso del cubrebocas, al tiempo que las autoridades sanitarias pidieron mantener vigentes las mascarillas para reducir los contagios.

“Lo último que necesitamos es el pensamiento neandertal de que mientras todo esté bien, quítate la mascarilla. Olvídate. Eso aún importa”, dijo el mandatario demócrata a periodistas en la Casa Blanca.

“Creo que es un gran error. Espero que todo el mundo se haya dado cuenta ya de que estas mascarillas marcan la diferencia”, añadió, al señalar las crecientes cifras de muertos.

Con más de 517.000 muertes y 28,73 millones de contagios, Estados Unidos es el país más enlutado del mundo por la pandemia de covid-19 pese a que ha avanzado en su campaña de vacunación masiva.

“No es el momento de levantar todas las restricciones”, coincidió Rochelle Walensky, directora de los Centros para la Prevención y el Control de Enfermedades de Estados Unidos (CDC), la principal agencia federal de salud pública del país.

“Cada individuo tiene el poder de hacer lo correcto, a pesar de lo que decidan los estados”, recordó durante una conferencia de prensa, animando a la población “a continuar llevando una mascarilla, respetando la distancia social”. Ante el avance de la campaña de vacunación, el gobernador republicano de Texas, Greg Abbott, anunció el martes el fin del porte obligatorio de mascarilla y la reapertura de todos los comercios desde la próxima semana.

Es hora de reabrir “al 100%”, afirmó, estimando que el segundo estado más poblado del país tenía ya “los medios de proteger” a su población. Misisipi optó por el mismo camino desde este miércoles: “Es el momento!”, tuiteó el gobernador, Tate Reeves.