Cristiano Ronaldo mostró nuevamente su lado menos amable, luego que fue pillado por los paparazzis al salir de una estética.

El delantero del Madrid estuvo acompañado de su madre, quien intentó calmarlo al notar que su hijo se molestó mucho al ver a los paparazzis y montó un show muy exagerado.

Por suerte, el altercado con los medios no llegó a mayores pese a que hizo la situación complicada.

El portugués es cliente habitual de ese salón de belleza, en donde se presume que se realiza tratamientos, masajes y capilares, para continuar mostrando su lado más atractivo.