POR: ERNESTO MARTINEZ PONCE

Al observar por televisión las incidencias del juego de anoche entre “Correcaminos” y León considero que no todo está perdido, mal haría la afición de ésta capital en bajar los brazos, el equipo jugó bien –no podemos ser injustos- el esfuerzo se vio sin embargo el rival también cuenta y tiene deseos de ascender.

No se debe pasar por alto que el arranque del torneo fue fatal para los “plumíferos” y se llegó a pensar que ni el boleto a la liguilla alcanzarían, ahora que juegan la semifinal siendo una cara totalmente opuesta al estilo de juego que practicaban el año anterior, los “Correcaminos” pisan tal instancia con el firme deseo de subir en pase directo a la Primera Nacional.

Vale resaltar que el León, es un conjunto que es de enorme tradición en la historia balompédica de nuestro país, grandes jugadores vistieron la casaca esmeralda,  quienes actualmente militan en tal institución tienen la misma sed y hambre de buscar retornar a la máxima gloria de nuestro fútbol.

El solitario tanto de Sebastián Maz no es suficiente, me atrevo a escribirlo, es raquítica la ventaja  de los “panzas verdes”, me resulta complicado imaginar que los “Correcaminos” no podrán darle la voltereta al marcador; son 90 minutos y seamos honestos el “Corre” cerró fuerte el torneo.

Los pupilos de Nacho Rodríguez no dudo en que saben el tamaño de compromiso que tiene con la noble afición de ciudad Victoria, es el equipo tamaulipeco que durante años ha gozado el apoyo del gobierno estatal en sus diferentes etapas, patrocinios importantes –de las cuales no ha gozado Tampico-Madero, en cualquiera de las divisiones en que ha militado- llegó a una final ante “Tigres” que resultó decepcionante al perder como local el ascenso y que a la fecha muchos siguen pensando que se “entregó” al rival, en lo personal señalaré que eso queda en la conciencia de los directivos, técnico y jugadores de aquella época, ellos mismos se engañan si dan una respuesta diferente a lo que realmente haya pasado.

Actualmente, los “Correcaminos” deben rifarse el físico en la vuelta cuyo escenario será en la capital zapatera, es cierto que al ser los campeones del torneo pasado,  ya tienen la final por el ascenso asegurada, pero una manera de resarcir aquel amarguísimo sabor de boca a los viejos aficionados y saldar una deuda de honor con las nuevas generaciones que apoyan a los “azul naranjas” la única forma sería ascendiendo al máximo circuito.

Amén del valor que implícitamente conlleva el ascenso a la franquicia, el lograr atraer un fútbol de mejor calidad, acompañado de patrocinios, televisión, difusión y que repercutirá en comercio y turismo cada quince días, con un ascenso ,un balompié de lujo, toda la ciudad –y el estado en sí- resultarían beneficiados.

Vayamos por partes, demos un voto de confianza a los jugadores y cuerpo técnico del “Correcaminos” porque a final de cuentas, los principales interesados en ascender y provocar que los vean son ellos mismos, promotores, clubes y técnicos. En pocas palabras se revalúan y ello significa $$$$$$$$$, no creo que por muy bien que jueguen muchos busquen un equipo valga la expresión “segundón” todos quieren a los “campeones” y la gloria la tienen en sus manos, muy cerca de hacer cimbrar a una ciudad y un estado, principalmente replantear su posición  buscar mejores horizontes, quizás sonará ilógico porque el coyote siempre va tras el Correcaminos, pero la historia moderna nos dice………….CORRE A CAZAR LEÓN.

POR HOY ES TODO, HASTA LA PROXIMA. MIENTRAS TANTO HAGA DEPORTE QUE NADA LE CUESTA.