Es difícil creer que un jugador por muy bueno o malo que sea este por encima de una institución deportiva, una institución que se debe a la máxima casa de estudios de Tamaulipas, y que es apoyada en su totalidad por el Gobierno del Estado.

El día de ayer por la mañana sin temor a la “golpiza” que me aseguró el jugador Axel Velázquez me iba a propinar, fui a hacer mi trabajo al Marte R. Gómez, donde entreno Correcaminos, a mi llegada el Presidente del equipo Francisco Filizola González me dijo que quería hablar conmigo en las oficinas del Club por la tarde, al cuestionarlo acerca del tema me dijo que era algo delicado y que no era el lugar para platicarlo, por lo que decidí esperar y hablarlo con él por la tarde.

Insisto en lo que escribí en mi columna de la Fiesta Naranja, ciudad Victoria es muy chica y de todo se entera uno, y es que un amigo me llamo y me dijo, -“qué onda Flama, que ya vas a hacer las paces con el Axel”-, le comente que no había entendido a lo que se refería y me dijo que Axel Velázquez en su BlackBerry Messenger tenía que iba a saldar una cuenta pendiente por la tarde, obvio como era el comentario, había sido citado por la Directiva de Correcaminos a las oficinas del Club con la idea de verme a escondidas de los medios y es que según Pancho Filizola los trapos sucios se lavan en casa.

Platique con el Director Deportivo de Correcaminos Manolo Campo acerca de cuál era el motivo de la reunión y me dijo que efectivamente habían citado a Axel Velázquez para que me diera una disculpa en la oficina, le dije que con todo respeto no era necesario, ya que si tenían que obligar al jugador a ir, y citarme a escondidas, para que de dientes para fuera me diera una disculpa no creí que fuera la forma de hacer las cosas, según Manolo el jugador estaba arrepentido, a lo cual le doy el beneficio de la duda, le pregunte que si no era lo mismo haber terminado el entrenamiento y simplemente acercarse a mi persona y decírmelo ahí, a lo cual Manolo simplemente contesto que él seguía ordenes, pero que me entendía, finalmente no accedí, ya que prefiero continuar mi trabajo cabalmente como hasta la fecha lo sigo haciendo, pero esta situación me deja un aprendizaje muy grande y se lo comenté a mi buen amigo Dario Vera, quien tiene más experiencia que yo en el medio, Correcaminos tiene un objetivo, que es el ascenso, y está siendo apoyado al máximo, pero lamentablemente con una Directiva tan mediocre que no sabe arreglar problemas tan sencillos, a porque no quiero saber el día que les digan algo los medios a nivel nacional, porque uff ahí si les va a caer agua, esperemos que ese sueño de ascender no se esfume por no saber manejar problemas y siempre querer las cosas a escondidas y en lo oscurito.